La polipectomía con asa se utiliza desde 1971 y resultó en un cambio de paradigma y pasó de ser la endoscopia de un procedimiento diagnóstico a uno terapéutico. Si resecamos pólipos neoplásicos antes de que se transformen en cáncer estamos previniendo su aparición. En años recientes hay un cambio entre el uso de la polipectomía con electrocauterio a la polipectomía fría que permite la resección del pólipo sin los peligros del electrocauterio.
Ventajas y Desventajas del Electrocauterio:
En la última década se ha visto que las técnicas de resección de pólipos con asa fría es la modalidad preferida para la mayoría de pólipos colorrectales. La principal ventaja de esta técnica es la seguridad y bajo riesgo lo cual ha contribuido a que se generalice este procedimiento. Al eliminar el electrocauterio se disminuye el riesgo de injuria térmica de la pared del colon con lo que baja la incidencia del síndrome post polipectomía, el riesgo de perforaciones y de sangramiento. Otra ventaja es que este procedimiento es más rápido lo que añade ventajas en cuanto a precio y duración del procedimiento. El electrocauterio agrega ventajas a la polipectomía con asa. Existen 3 ventajas en este sentido: permite polipectomías más extensas y profundas, en segundo lugar produce una penumbra alrededor del tejido resecado lo que en teoría disminuiría la posibilidad de neoplasia residual microscópica y en tercer lugar el electrocauterio asegura la hemostasia de forma inmediata.
Polipectomía:
El objetivo es resecar el pólipo completamente, se debe incluir un anillo de tejido normal y debería ser una sola pieza. A pesar que el electrocauterio se utilizaba para la polipectomía de pólipos < 10 mm de tamaño, numerosos estudios han demostrado que la polipectomía con asa fría es segura y efectiva. Muchas publicaciones han demostrado que es superior a la polipectomía con pinza en el sentido de resección completa del pólipo. A pesar de que existen estudios demuestran que la pinza jumbo puede ser muy efectiva para pólipos ≤ 5 mm es preferible utilizar el asa de forma rutinaria. Antes de realizar el procedimiento es importante definir los bordes y el tamaño del pólipo, en los pólipos serrados los bordes son difíciles de definir en ocasiones. En estos casos se puede utilizar el capuchón transparente o cromoendoscopia. El pólipo debe posicionarse entre las 5 y las 7 horaria y se debe mantener una distancia corta, para ello se debe realizar un movimiento de torque del colonoscopio, se debe estar familiarizado con las técnicas de manipulación del asa de polipectomía de manera de que se logre un procedimiento limpio y efectivo.
Técnica de la Polipectomía:
Una de las claves es alinear la lesión con el canal de instrumentación, abrir el asa desde la porción distal y cerrar de manera progresiva, al estar cerrado no debe volver a abrirse ya que se distorsiona la muestra.
Pasos:
Si se toma gran cantidad de tejido submucoso puede ocurrir que el asa se trabe, esto puede producir resección incompleta del pólipo.
Si el asa no se cierra completamente no se debe aplicar electrocauterio, simplemente detenerse y repetir procedimiento desde es paso 1.
Paso 1: se debe maximizar la transmisión de fuerza a través del asa: mantener insuflación y cierre del asa, esperar, en este momento debe lograrse la polipectomía. Evitar cualquier asa en el instrumento y reducir la angulación en la punta del instrumento. Rectificar la longitud del asa desde la punta del endoscopio hasta el mango. Se puede realizar movimientos del asa hacia adelante y atrás para facilitar la polipectomía.
Después de algunos segundos se debe completar la polipectomía, sino ocurre:
Paso 2: liberar la submucosa de la siguiente manera:
Reabrir el asa ( hasta un tercio) pero no completamente. Realizar movimientos suaves para separar la lesión de la pared hasta visualizar que se libere la submucosa. Reposicionar el asa. Cerrar de nuevo el asa.
Si queda algún tejido residual se debe repetir el procedimiento con el asa.
La seguridad de la polipectomía con asa fría puede justificar el hecho de que en la actualidad pueda ser utilizada para lesiones de mayor tamaño, como es el caso de que el paciente tenga riesgo para procedimientos como la resección mucosal endoscópica.