- Estar activo, no retirarse. Aquello que abandonan las cosas que aman hacer y hacen bien pierden el propósito de vivir. Por eso es que es tan importante mantenerse haciendo cosas de valor, hacer progresos, traer belleza y ser útil a otros, ayudar y transformar el mundo a tu alrededor.
- Tomarlo con calma. Las preocupaciones son inversamente proporcionales a la calidad de vida. Como dice el viejo dicho: si caminas despacio llegaras mas lejos. Cuando abandonamos la urgencia, la vida y el tiempo adquieren un nuevo significado.
- No abuses de las comidas. Comer poco prolonga la vida. De acuerdo a la ley del 80%, para mantenerse sano por mas tiempo debemos comer menos de lo que nuestro apetito nos impone.
- Rodéate de buenos amigos. Los amigos son la mejor medicina para las preocupaciones, una buena conversación en base a las experiencia vividas le da sentido a la vida.
- Mantente en forma para tu próximo cumpleaños. El agua se mueve y es mejor cuando es fresca y no se estanca. Nuestro cuerpo requiere mantenimiento diario para seguir funcionando por un tiempo largo. El ejercicio produce hormonas que nos hacen sentir feliz.
- Sonríe. La risa no solo te relaja sino te ayuda a conseguir amigos. Es buena idea reconocer que no todo es bueno pero debemos recordar que es un privilegio estar aquí y ahora en un mundo lleno de posibilidades.
- Reconecta con la naturaleza. La mayoría de la gente vive en grandes ciudades, pero el ser humano es parte de la naturaleza a la que debemos retornar para cargar baterías.
- Ser agradecido. A nuestros antecesores, a la naturaleza que nos provee del aire que respiramos, a la familia y a los amigos, a todo lo que brilla en nuestros días y a la suerte de estar vivos. Aparta un momento de tu vida para agradecer y veras que tu felicidad crece a cada momento.
- Vive el momento. Detente anhelando el pasado y temiéndole al futuro. El ahora es con lo que se cuenta, vivelo de la mejor manera.
- Sigue tu Ikigai. Hay pasión en tu interior, un talento único que da significado a tu vida y te conduce a compartir lo mejor de tu mismo hasta el final. Si no sabes cual es tu Ikigai tu misión es descubrilo como dijo el doctor Viktor Frankl.