La influencia de la microbiota intestinal y sus alteraciones se asocian a enfermedades digestivas crónicas como la encefalopatía hepática, el síndrome de intestino irritable y la enfermedad diverticular. La microbiota tiene un amplio espectro de funciones dentro de las que destacan metabolizar polisacáridos, la absorción de diferentes tipos de nutrientes y iones,lípidos,ácidos biliares y la producción de vitaminas como folatos,biotina y vitamina K.
La Rifaximina es un antibiótico oral no absorbible, de amplio espectro, efectivo contra bacterias Gram positivas y Gram Negativas, aerobios y anaerobios. Es un análogo estructural de la Rifampicina que inhibe la síntesis bacteriana de ARN,su actividad es a nivel del tracto gastrointestinal y alcanza concentraciones elevadas en las heces con poco efecto sobre la microbiota intestinal.
Encefalopatía Hepática
La encefalopatía hepática (EH) se clasifica en:
- Tipo A: que ocurre en el contexto de la falla hepática aguda
- Tipo B: que ocurre en el contexto de la derivación porto sistémica
- Tipo C : que ocurre en el contexto de la cirrosis e hipertensión portal
La encefalopatía hepática mínima es el diagnóstico más común y puede afectar entre el 30-70% de los pacientes. La microbiota intestinal juega un papel importante en el desarrollo de esta patología, por ejemplo altos niveles de Veillonellaceae en la flora fecal se ha relacionado con encefalopatía. La encefalopatía tipo C se asocia a niveles elevados de Enterococos, Villonella, Megasphaera y Burkholderia y niveles bajos de Roseburea en la mucosa del colon sigmoides.
La evidencia sugiere que la acumulacion de toxinas provenientes del intestino (especialmente amonio) que son producidos por las bacteria,la inflamación y el stress oxidativo contribuyen al desarrollo de la enfermedad. Estas toxinas pueden causar edema cerebral, alteraciones de la función hepática y desarrollo de shunts porto-sistémicos lo cual limita la posibilidad del hígado para eliminar toxinas
La translocación bacteriana es un factor importante en pacientes cirróticos y esto se debe al aumento de la permeabilidad intestinal, alteraciones inmunológicas y sobrecrecimiento bacteriano.
El tratamiento de la encefalopatía hepática depende de la reserva de función hepática y del grado de alteración neurológica. El objetivo del tratamiento es disminuir los factores precipitantes (infecciones y hemorragia digestiva) y reducir los niveles de amonio circulante utilizando disacáridos no absorbibles como la lactulosa y el lactitol y agentes antimicrobianos como la neomicina y la rifaximina.
Se considera que la Neomicina no es un tratamiento efectivo para la EH debido a fata de evidencia y efectos colaterales. Se ha demostrado que la Vancomicina tampoco es efectiva en el tratamiento de esta patología porque produce la aparición de cepas bacterianas resistentes tales como Enterococo y clostridium difficile.
La Rifaximina ha demostrado que mejora los síntomas neuropsiquiátricos y disminuye los niveles de amonio con disminución de la mortalidad en pacientes cirróticos. Se utiliza tanto en el tratamiento de episodios agudos de EH como en la prevención de la recurrencia obteniendo excelentes resultados. Existen trabajos que demuestran que su uso en combinación con lactulosa en pacientes cirróticos disminuye los episodios de EH y reduce la mortalidad.
Síndrome de Intestino irritable
El síndrome de intestino irritable (SII) es un trastorno funcional crónico y recurrente que se caracteriza por dolor abdominal asociado a las evacuaciones o alteraciones en el hábito intestinal con impacto en la calidad de vida. Su prevalencia se ubica entre un 5 al 15% en la población general. Su etiología es multifactorial: factores psicológicos (ansiedad y depresión),dieta, cambio en las funciones motoras del tracto digestivo, aumento de la percepción visceral y cambios en la microbiota intestinal.
Algunos pacientes desarrollan síndrome de intestino irritable posterior a un episodio agudo de gastroenteritis bacteriana o viral por alteraciones de la microbiota intestinal. cerca de un 10% de pacientes desarrollan esta enfermedad posterior a infección por Salmonella, Shigella, Campilobacter o E. coli (Sindrome de Intestino irritable post infeccioso)
La composición de la flora bacteriana difiere entre pacientes con SII y controles siendo significativa la reducción de la diversidad bacteriana tanto en SII no específico como el postinfeccioso. Los pacientes con SII tienen una disminución en la composición de la microbiota beneficiosa como es el caso del Lactobacilo. Se sabe que los pacientes con SII son intolerantes a ciertos tipos de alimentos como los FODMAP.
Se ha demostrado que la Rifaximina administrada a dosis de 550 mgs tres veces al día por 14 días mejora la sintomatología de pacientes con SII con predominio de diarrea y gases sin efectos colaterales y con buena tolerancia. Esto se debe a que altera la composición de la microbiota disminuyendo la inflamación, mejorando la permeabilidad a nivel del intestino delgado y reduciendo la hiperalgesia visceral con alteraciones en el metabolismo bacteriano
Enfermedad Diverticular
A pesar de que la mayoría de los pacientes se mantiene asintomático se sabe que aproximadamente el 20% desarrolla síntomas como son los cambios en el hábito intestinal y dolor abdominal, cerca del 20% desarrollara complicaciones inflamatorias lo cual aumenta la morbilidad y mortalidad.Se pensaba que la ingesta baja de fibra es u factor predisponente de divertículos sin embargo hoy en día se sabe que las alteraciones de la microbiota intestinal y la inflamación de bajo grado son factores contribuyentes para el desarrollo de esta enfermedad.
La obesidad es un factor de riesgo para el desarrollo de divertículos, se han implicado varios mecanismos como las alteraciones de las citoquinas, aumento de la presión intraabdominal,alteraciones de la dieta, alteraciones de la microbiota.
Se han utilizado los probióticos en el tratamiento de la enfermedad diverticular para disminuir la inflamación debido a su mecanismo de reducción de las citoquinas pro inflamatorias. La Mesalazina mejora los síntomas de los pacientes. La Rifaximina es el mejor antibiótico hasta la fecha para el tratamiento de la enfermedad diverticular sintomática.
La Rifaximina ha demostrado su efectividad para disminuir los síntomas de la enfermedad en especial cuando se combina con alta ingesta de fibra
Tomado de:
- New concepts on intestinal microbiota and the role of the non-absorbable antibiotics with special reference to rifaximin in digestive diseases. Bajaj J,Barbara G, DuPont H et al. Digestive and Liver Disease 50 (2018):741-749.